Según el testimonio de María García Osuna, cuando se construyó el Colegio Epora, cerraron la "escuela de la Estación", que actualmente alberga el conservatorio de música.

El centro se desarrolla en un edificio en forma de “L” de dos plantas de altura, subdivididas en semiplantas para ajustarse al máximo a la topografía del solar. Los cuatro niveles resultantes van desencontrados en medios pisos (nivel 3 sobre nivel 1, y nivel 4 sobre nivel 2). A partir del vestíbulo central, dos escaleras, una en cada ala del edificio, dan acceso a la planta superior. En el primer nivel se encuentran los porches, espacios de circulación, vivienda del subalterno, cocinas y anexos, salón de usos múltiples y capilla. En el segundo nivel se sitúa la administración, aulas de 1º y 2º cursos, biblioteca, espacios de circulación y porches cubiertos. En el tercer nivel están las aulas para los 3º, 4º y 5º cursos, tutoría y laboratorio. En el cuarto, aulas de 6º, 7º y 8º cursos, tutoría, pretecnología y aseos. El edificio se proyecta sobre cuadrícula de 1,40 metros de lado, resultando la estructura en módulos de 5,60 x 7 metros.